El Museo Nacional de la Historia del Traje brindará el día sábado 3/06 a las 15.30 hs una charla sobre: “La evolución del vestido y y rol social de la mujer: Del Corset al Pantalón”, a cargo de la Dra. Eloísa Sánchez-Amillategui.
De formación jurídica, se dedica hace años al mundo del arte y la cultura. En la actualidad, comparte su tiempo entre Uruguay, Argentina y España. En este último país, es miembro activa de la Asociación de Amigos del Museo del Traje y Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico, de la que es Secretaria.
También, forma parte de la Asociación de Amigos del Museo del Grabado Español Contemporáneo de Marbella y es Secretaria de la Asociación de Mujeres Universitarias de Marbella.
Eloísa inicia un viaje hacia el siglo XVIII donde el corsé es la figura indiscutible para resaltar la belleza femenina y también, un objeto de tortura.
¿Por qué el corsé en una prenda que deformó el cuerpo de la mujer por alcanzar la “cintura de avispa”?
Es una prenda que surge en la corte durante el Imperio español y se extiende entre los siglos XVI y XVII para pasar a formar parte de todas las monarquías absolutistas de Europa. De aquí nace la frase: “vestir a la española”. Es interesante señalar que se va a mantener hasta el sigo XX ajustándose a las diferentes modas y a la construcción del cuerpo femenino. A las niñas de 7 años se las obligaban a llevar corsé rígidos e incómodos hechos con las barbas de la ballena o de árbol de bambú para que ya vayan adquiriendo la postura y compostura correcta. Recordemos, era una forma de estar, de comportarse y llevar esa dignidad que tenía la mujer en la sociedad. Era doloroso porque te limitaba los movimientos a pesar de las terminaciones en cintas de algodón y además, generaba pellizcos en la piel. Cabe destacar que si bien Napoleón odiaba el corsé porque decía que la natalidad había descendido, sus mujeres lo utilizaban. Sin embargo, existen los corsé para embarazadas si bien es verdad, podía dañar el feto y los órganos internos hasta saber la noticia.
¿Qué sucede a partir de la Revolución Francesa?
Antes de la Revolución, hay un antecedente importante: el descubrimiento de las ruinas de Pompeya y Herculano, donde a partir de la estatuaria clásica aparece la figura en estípite y el cuerpo suelto. Por ejemplo, en el caso de la reina María Antonieta, el rey Luis XVI le regala el <<chameau>>, una especie de aldeita que estaba dentro del <<le Petit Trianon>> (El Pequeño Trianon) del Palacio de Versalles ya que es una amante de la naturaleza. Allí, la reina se siente más libre y se sustrae del rigor de la corte al llevar trajes de muselina sueltos llamados <<chemise à la reine>> ; que era como decir: “la reina iba en camisón” porque estaban confeccionados en yelin, una tela utilizada para la ropa interior. La Revolución hace que el cuerpo de la mujer sea un símbolo y lo libera aunque es importante señalar que el corsé no desaparece hasta la Primera Guerra Mundial.
Entre las diseñadoras mencionadas en algunos de sus trabajos figuran: Amelia Bloomer y Coco Chanel, ¿por qué las elige?
Amelia Bloomer es la primera sufragista. Es una norteamericana cuyo marido tiene un periódico llamado “The Lily” y aprovecha esta publicación para introducir temas de la mujer: recetas de cocina, tejidos, ropa para bebé, entre otros y además, reivindica el rol de la mujer demostrando que puede hablar en público y ser escuchada. Destacó también que influyó en el vestuario femenino tomando como inspiración los pantalones de las mujeres turcas, una especie de bombacho que se cierra a la altura del tobillo y acorta la falda. A esta moda se la denominó el “blooomerismo” y fue tan escandalosa que se apuño el término: “to make a bloomer” (meter la pata).
Por otro lado, Coco Chanel es una antena que capta todo lo que sucede en la sociedad donde las vanguardias están de moda. En el siglo XX la mujer ya no es más quién está en la casa sino en las fábricas como obrera. El gran aporte de Chanel es hacer una moda que una la elegancia con el pragmatismo. La mujer puede ir elegante a cualquier lado y sentirse cómoda. Ella introduce el punto que era exclusivo de la ropa interior y lo pasa al exterior. Copia los tweed de los ingleses y el pantalón. Introduce el vestidito negro conocido como “little black dress”, surgido como inspiración del público que va al teatro y lleva puesto sedas brillantes multicolores, mangas, bijouterie y sombreros. A partir de allí, crea una moda del siglo XX para una mujer que puede moverse por su cuenta manteniendo la estética en la bijouterie o en sus sombreros.
En la actualidad, la mujer adquirió un rol central en la política, ¿por qué figuras como la canciller alemana Angela Merkel utilizan el traje chaqueta?
La chaqueta de Chanel única que no lleva entretela será mundialmente conocida.
Representantes como Angela Merkel o Michelle Bachelet llevan el traje de chaqueta porque se van igualando al hombre sin olvidar el toque femenino: un collar o broches. El mensaje de la hombrera significa que le muestra al mundo: “soy mujer pero no tengo las espaldas de hombre”, por eso lo falseo. Exhibe su capacidad de cumplir con sus obligaciones. Por ejemplo, en el caso de Merkel es una mujer única, el epítome de responsabilidad sobre lo que debe ser una mujer. Cree y representa su servicio al cargo y no el cargo a su servicio. También, da una imagen de respeto, confianza y mando. No reniega de ser mujer. Ella tiene a la misma diseñadora de toda la vida y la deja jugar con los colores. Es muy lúdica. A veces, la chaqueta es con solapa y otras, de tres botones aunque el corte es siempre el mismo. Lo lleva con pantalón o con falda. Cuando tiene un evento práctico, usa pantalón de un color y la chaqueta de otro. Para terminar, hay un detalle fundamental, su demanda: que la chaqueta siempre tenga dos bolsillos, para sus teléfonos.
Ella puede usar un escote pero cada momento tiene su aspecto adecuado.